Foto: Record Guiness. Un Rover viejo modificado que funciona con los restos que quedan en la cafetera, gasificados.
Con la gasolina cada vez más cara, los ingenieros proponen ideas al margen del petroleo, y hay bastantes alternativas. Una de las más extravagantes es ésta: los restos de café de una cafetera incinerados, producen un gas que se inyecta en el motor. Ecológico y encima no te priva de tu café, sino que reutiliza lo que tú ya no usas.
El Coffee Car Mk2, un Rover SD1 modificado, ha conseguido superar el Récord Guiness de velocidad con vehículos movidos por materia orgánica.
Unos ingenieros británicos consiguieron alcanzar 124, 7 km/h utilizando una caldera en la parte posterior del coche que quemaba los restos del café que quedan en una cafetera tras su uso. El proceso de incineración, a 700ºC, propiciaba la generación de monóxido de carbono, metano y hidrógeno que, una vez comprimidos, se inyectaban a los cilindros para poner en marcha el motor.
Además consiguieron reducir el peso habitual del vehículo en 250 kilos eliminando partes del mismo como los asientos o aislantes de temperatura y ruido. En un vídeo de los ingenieros se ve perfectamente el estado final del coche así como el proceso seguido para ponerlo en marcha.
Foto: Granos de Café. El cofee car, necesita los restos después de la preparación del café. No te quita tú café, cosa bastante importante. Diario Público
No es que vaya a convertirse en el sustituto del petróleo, pero al menos es curioso ver cómo si nos lo planteamos seriamente, las alternativas para poder mover nuestros coches son prácticamente infinitas. Sólo hay que tener bastante tiempo libre y, sobre todo, muchísima imaginación.
Fuente: Libro Guiness 2012; Foto: 2, Diario Público
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